Lunari se fue abucheado por los hinchas celestes

Cabizbajo y rechiflado. Así se fue el entrenador de Blooming, Ricardo Lunari, del terreno de juego tras la derrota de su equipo ante Bolívar (0-3). Sus decisiones fueron refutadas por los hinchas que llegaron al estadio Tahuichi para apoyar a su equipo. La victoria en su casa era clave para acercarse al líder del Apertura, Guabirá, y evitar que su rival de turno llegue al segundo lugar.

Ni bien el árbitro del partido, Gery Vargas, dio el pitazo final, Lunari salió sin hablar con los medios radiales que se apuestan en el límite de la cancha para llevar a sus oyentes la palabra de los protagonistas. El entrenador argentino evitó el contacto y bajó directamente por el túnel al vestuario celeste. Los hinchas le reclamaron hasta que se perdió por completo de sus vistas.

No se conformaron con silbarle, también se apostaron afuera del camerino celeste para pedir su salida, pero fueron dispersados por el efectivo policial. “A Blooming se lo respeta c…”, fue una de las frases que repitieron los hinchas. La fuerza pública se quedó a resguardar la salida de los protagonistas del compromiso, ya que también sus familias los esperan al salir del escenario deportivo.

Apoyo incondicional

A diferencia de la actitud que tuvieron con el DT, los fanáticos de la academia aplaudieron a sus jugadores cuando se retiraban de la cancha. Los hinchas, en las redes sociales, pedían el ingreso desde el inicio a Blas Pérez, pero el entrenador presentó a Mariano Guerreiro para hacer dupla con César Pereyra. La molestia llegó hasta el final del partido, ya que el resultado fue negativo.