Mientras todo se envuelve en un frenesí de fiesta, música y baile, los tres equipos representativos cruceños solo piensan en una cosa: trabajar para mejorar su respectiva performance de cara a lo que será la reanudación de la Liga y también compromisos internacionales.
A cambiar la cara. Oriente Petrolero entrena en Cochabamba para no sufrir la altura de Bogotá cuando el jueves dispute la vuelta de la primera fase de la Copa Libertadores ante Independiente Santa Fe. La idea es trabajar subiendo la carga e intensidades en los trabajos físicos.
"La clave es hacer una especie de minipretemporada para que los jugadores lleguen en plenitud física al partido en Bogotá", expresó Ronald García, director deportivo de Oriente Petrolero. Con el regreso de Mariano Brau a la zaga central defensiva, con Gualberto Mojica y Marcelo Román habilitados para la vuelta, a Oriente le cambia la cara para afrontar un duro cotejo en Colombia. Para ello entrenará en el amplio complejo de Aurora, sin descansar por carnaval.
El 'toro' necesita afinarse. En el caso de Sport Boys es similar a lo que hará Oriente, pues el equipo trabajó ayer y hoy descansará. Pero mañana mismo viajará a Potosí para prepararse de cara al partido que tendrá el sábado ante Real Potosí, pero la manera en que tendrán que prepararse será muy diferente a lo que se plantea en el cuadro "refinero".
"Nosotros tenemos que hacer mucho fútbol. En la parte física estamos bien, pero tenemos que pulir muchos conceptos futbolísticos, como es la generación de juego ofensivo o la definición de una jugada. Hemos visto que tenemos problemas en 3/4 de cancha. Entonces eso trabajaremos", expresó el ayudante de campo de Sport Boys, Sergio Apaza.
El estratega también afirma que con los regresos de Anthony Tapia y de Wilder Medina, Sport Boys podrá recuperar el poderío ofensivo que supo tener en la anterior temporada.
Hay que recordar que el actual campeón liguero abrirá la quinta fecha ante Real Potosí en el estadio Víctor Agustín Ugarte.
La academia, a puro esfuerzo. Blooming jugó el viernes por la noche, por lo que el carnaval no le trastocó la semana. De hecho, entrenó ayer y hoy descansará.
"Nosotros no tuvimos que hacer mucho, de hecho la semana no se nos cortó por el carnaval porque jugamos el viernes. Lo que hicimos es trabajar el sábado, domingo los jugadores tendrán libre y a partir del lunes será una semana de trabajo normal, con tres o cuatro días de jornadas de doble turno. Algo que aplicaremos viendo cómo viene la semana", finalizó Alejandro Schiapparelli, entrenador adjunto de Blooming.
Sin importar carnaval alguno, en Santa Cruz los clubes trabajan y buscan obtener resultados victoriosos, porque de hecho los necesitan sin importar que día sea o qué festividad haya.
Puntos de vista
Parar en carnaval, dos perspectivas diferentes
"Me parece contraproducente detener el fútbol por el carnaval. Siempre he dicho de que tenemos que jugar mucho más que los demás países, debido a las falencias que tenemos", expresa Sergio Apaza, el ayudante de campo de Sport Boys, quien se adhiere así al mensaje claro que envió el entrenador de The Strongest, Pablo Caballero, cuando hace unos días expresó su disconformismo de que se detenga el fútbol por las carnestolendas.
"Principalmente el carnaval es una cuestión cultural en Bolivia, pero también juega lo económico. Si se jugara un domingo, la realidad es que nadie iría a la cancha y eso no es bueno para los clubes. Directamente no les sirve", expresa Schiapparelli, otra visión de este tema.
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