Blooming dio una lección de efectividad anoche en el estadio Tahuichi Aguilera y se adjudicó el clásico 166 de la historia de la Liga frente a Oriente Petrolero al que derrotó por la cuenta de dos goles contra cero, los goles fueron convertidos por Leandro Ferreira y Pablo Salinas.
El cotejo que cerró la décima jornada del torneo Clausura de la Liga fue emotivo y con mucho roce en la cancha. Primó más el juego fuerte que la cuota de técnica. El colmado escenario de Santa Cruz fue testigo de un partido en el que los equipos se preocupaban más en no cometer errores y aprovechar cualquier descuido.
Dos minutos habían transcurrido de las acciones y el árbitro Juan Nelio García tuvo que apelar a las tarjetas amarillas para Nicolás Di Biase y Rodrigo Vargas y enfrió los ánimos.
El resultado del cotejo dejó una lección a los orientistas de que no sirve tener el control del balón, llevarlo hasta el ingreso al área grande si falla la contundencia. El albiverde dominó el juego en gran parte de las acciones, pero le faltó la puntada final.
Blooming, en cambio, llegó menos al arco de Guillermo Viscarra, pero sus ataques con remates de media distancia fueron incisivos y el rédito fue quedarse con las tres unidades. Cuando parecía que el resultado en blanco iba a ser la característica del primer tiempo el celeste cruceño abrió la cuenta , hubo una dosis de buena suerte para superar a Viscarra.
Aníbal Rotundo quedó en inmejorable posición luego de un rechazo corto de la defensa de Oriente y sacó un remate que se iba de la cancha, pero Leandro Ferreira estuvo en el lugar preciso y con toque suave cambió el destino de la pelota y quebró el cero a los 45 minutos. En la segunda mitad aumentó la emoción, Guillermo Hoyos, el DT de Oriente, se jugó el todo por el todo en procura de cambiar la historia del juego.
Manejó el partido, pero le faltó profundidad, fueron pocas las ocasiones que llegó con real sensación de peligro. Siempre hubo un adversario que se encargaba de poner freno a sus intentos. Blooming esperó replegado, pero no renunció al ataque. De rato en rato imprimía velocidad a sus acciones y una de ellas terminó en la estocada final.
La acción transcurrió toda por la banda izquierda y se generó en la última línea, Di Biase le entregó la pelota a Joselito Vaca, quien prolongó hacia Hugo Bargas, el delantero desbordó y mandó un centro al área chica donde llegaba Pablo Salinas, quien de derecha puso el 2-0 final a los 28’.
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