Vaca dice que en Blooming no hay con quién hablar

Blooming les debe a sus jugadores salarios de cuatro meses, está sin practicar y lo peor es que los jugadores no tienen con quién hablar, porque los dirigentes no aparecen. El mediocampista y capitán celeste, Joselito Vaca, dijo ayer que junto con sus compañeros viven “amargos momentos” por una situación crítica atribuible solo a los dirigentes.

Debido a esta situación, el plantel está en paro, aunque acude a diario a la sede del club. Sin embargo, en vano, porque no hay un portavoz oficial del directorio. En 17 años que lleva en el fútbol profesional, Vaca dijo que vivió varios momentos difíciles, pero ninguno como el actual.

“Todos estamos muy preocupados, enojados, ya ni sabemos qué decir, porque hemos protestado de diferentes formas. Es una situación incómoda, porque los jugadores somos los únicos perjudicados y nadie puede hacer algo. Ojalá que surja alguien que nos pueda ayudar y que aquí en el club nos den una solución”.

La última palabra del club es una petición para que el plantel espere 10 días para poder cobrar, en virtud a que hacen gestiones para obtener los ingresos comprometidos por un inversor. Los jugadores —que en el anterior torneo solamente cobraron dos salarios— no tienen garantía de que eso se vaya a cumplir. Si el torneo Clausura comienza este fin de semana, Blooming debe recibir la visita de The Strongest. Los futbolistas celestes solo realizan trabajos por su cuenta para no perder estado físico.

“Ese es el problema, si el torneo efectivamente va a comenzar normal, como maneja la Liga, la gente nos exigirá a los jugadores que estemos preparados y ganemos, porque igual tenemos que entrar al ruedo estemos o no con entrenamiento. Mientras que los rivales están trabajando de buena forma y los únicos perjudicados ahora somos nosotros”.

Su compañero de equipo Hugo Bargas sostuvo que los futbolistas se sienten abandonados. “Nadie nos llama, nadie nos contesta, viene gente particular a decirnos que nos van a pagar y luego desaparece, esto ya pasó cualquier límite. Eso es lo que más nos apena”, lamentó el argentino-francés, quien en cualquier momento podría dejar el club. Marcas de La Razón intentó contactar a los directivos de Blooming, sin embargo ninguno respondió a los llamados.