Los momentos complicados que pasó el equipo de Blooming hasta hace una semana quedaron en el olvido este domingo por la noche con un triunfo sobre The Strongest por la mínima diferencia (1-0) en un partido donde primó más la garra que el buen juego. Los dirigidos por Hernán Eduardo Boyero mostraron sus ganas de quedarse con la victoria desde el minuto inicial para comenzar con el pie derecho su andar en el certamen.
De principio a fin, los celestes mostraron su actitud, coraje y determinación para terminar disfrutando de su premio al esfuerzo junto a sus 15.000 hinchas que llegaron hasta las graderías del estadio Tahuichi. En un partido luchado, donde hubo poco juego vistoso y mucho desgaste físico, los futbolistas de la academia cumplieron a cabalidad el libreto que ordenó su entrenador para sacar a flote un duelo bastante complicado.
Apoyados por la experiencia de Hugo Suárez desde el fondo, el temperamento de Roly Sejas y Nicolás Di Biase en el medio campo, además de contar con un incansable Joselito Vaca, Blooming comenzó a edificar los cimientos de su triunfo con perseverancia y una gran disciplina táctica a diferencia de su rival, que se preocupó más por otros aspectos y terminó muy nervioso sobre el final. El entrenador de la visita, Pablo Caballero, se la jugó por un sistema de juego diferente para hacerle frente a los cruceños, pero quedó molesto y preocupado por lo poco que mostraron.
Las únicas opciones de gol en la primera parte para ambos bandos fueron unos remates con poca potencia y dirección hacia los arco del ‘Chila’ Suárez y de Daniel Vaca, que tuvieron pocas intervenciones durante los 90 minutos. La primera mitad tuvo un desarrollo bastante luchado en la zona del medio campo y los minutos se fueron escurriendo rápidamente hasta llegar al descanso. Los celestes, que estrenaron camiseta, se fueron a los vestuarios con la sensación de que pudieron hacer más daño a su oponente.
El gol llegó de una pelota parada
A tan solo 15 minutos de reiniciar las acciones en la segunda etapa, los muchachos de Boyero y Schiapparelli encontraron el camino hacia la victoria. Una centro al corazón del área por parte de Joselito Vaca le permitió a ‘Nico’ Di Biase desviar la trayectoria de la pelota y en su afán de despejar el balón, el brasileño Luis Fernando Marteli batió a su propio arquero para el 1-0 y de esa forma hacer estallar a todos los fanáticos de la academia.
Después de la apertura del marcador, los bluministas se replegaron atrás en busca de salir de contra y liquidar el partido ante un Tigre que atacaba de forma desesperada. Un zurdazo de Pablo Escobar que despejó Suárez al tiro de esquina fue lo más peligroso que generaron los paceños, que tuvieron en su momento en cancha a Carlos Neumann, Rodrigo Ramallo, Mariano Torres y Matías Alonso. Ninguno de ellos pudo hacer la diferencia para igualar las acciones.
El final del compromiso llegaría y el pitazo final del árbitro José Jordán desató el desahogo de un equipo que estaba sin cobrar hace cuatro meses, pero que le puso el pecho a la situación y de esa conseguir un triunfo que aliviana las cargas en el plantel. Ahora Blooming pone la mirada en Wilstermann, al que enfrentará el jueves en Cochabamba.
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