El clásico 184 de la historia del fútbol profesional boliviano fue para Blooming. Los celestes, dirigidos por Erwin Sánchez, se impusieron por 2-0 con goles de Paúl Arano, que aprovechó las licencias en la última línea albiverde para conectar prácticamente sin marca dos goles clave.
El primero se dio a los 9' luego de una arremetida de Júnior Sánchez, que continuó César Pereyra y que le permitió a Arano llegar solo para conectar ante el desesperado achique del meta Guillermo 'Billy' Viscarra. Premio para un Blooming que había comenzado mejor el clásico.
En realidad, cada vez que Blooming encaró hacia el frente, lo hizo con riesgo, aprovechando la velocidad de Leo Vaca y el aplomo en la mitad de la cancha de Sánchez que recuperó casi siempre. Pero además, la academia tenía aplomo en la última línea.
Oriente lució nervioso a tal punto que el hombre que buscaba empujar, era el zaguero paraguayo Jorge Paredes. Maxi Freitas no tuvo en Deni Bejarano a un socio ideal arriba y el equipo sufrió bastante. Encima, cuando tuvo opción, el meta Rubén Cordano lució pulcro.
En el complemento, Blooming se mantuvo fuerte atrás y cuando el 'Picante' dejó la cancha en lugar de Britos, la apuesta se centró en resistir los embates y buscar la contra aprovechando la velocidad de Leo y que Britos es un jugador que aguanta bien. Ahí estuvo la diferencia.
Lo de Oriente siguió siendo opaco, sin imaginación, buscando algún rebote o alguna jugada heroica de Freitas cuyo aporte no bastó. Ni el ingreso de Ronaldo Sánchez -impreciso- ni de Diego Velásquez, le dio aplomo al atacar y al final terminó rendido ante un rival superior.
Al final Blooming acabó festejando un partido que lo mereció porque tuvo puntos altos como Cordano, Latorre, Sánchez, Leo Vaca y Paúl Arano que terminaron marcando diferencias. El triunfo lo pone además a Blooming en plena carrera para pelear por una Sudamericana.
Lo de Oriente en cambio es una crisis plena. El sábado se conoció la renuncia del presidente José Ernesto Álvarez y lo queda del directorio esperaban una victoria para despedir bien al ahora expresidente, sin embargo, la derrota no hace más que desangrar la herida.
Los hinchas celestes acabaron festejando de manera eufórica porque este 2018 fue un año casi perfecto porque de los cuatro clásicos que se disputaron, Blooming ganó tres y se registró un solo empate. La academia se llevó un clásico merecido con Arano como figura.
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