lunes, 21 de abril de 2014

Mauricio Ronald Soria Portillo: “El equipo estaba mal en todo: en lo físico, técnico, mental y grupal”

Un técnico polémico, de carácter fuerte, con la disciplina como una norma de vida y sobre todo ganador: como jugador y entrenador acumula ocho títulos ligueros. Ese es Mauricio Soria Portillo, que asumió el desafío para dirigir a Blooming, ubicado en los últimos lugares del Clausura y que si hoy acabara el torneo, la próxima temporada la iniciaría en zona de descenso.

Soria aceptó la entrevista, que se la hizo pasadas las 22:00 del jueves, pues en estos días (asumió el 8 de abril) está muy ocupado y entusiasmado con su nueva función, y, como él dice, cuando se mete a algo es para trabajar las 24 horas. Es más, en media entrevista recibió la llamada del presidente de Blooming, Erwin Peredo, a quien le dijo que el equipo está respondiendo bien y que en ocasiones ha hecho repetir hasta 80 veces la misma jugada.

Siguiendo con la entrevista, el DT dejó en claro que no aceptará un acto de indisciplina, también contó los pormenores de su primer día de práctica y de lo mal que lo dejó a su equipo el anterior técnico, Gustavo Díaz. Soria, como es conocido, fue de frente y no se guardó casi nada. Además, dijo que viene a Blooming para ser campeón en la próxima temporada.

¿Qué lo motivo para asumir en Blooming, sabiendo el momento que vive?
La principal motivación es venir a un lugar muy diferente a los que había trabajado antes. Creo que hay muchas cosas por valorar acá, sobre todo que hay una sede donde se puede trabajar a placer. Entrené antes en Wilstermann y Real Potosí, en los que a veces no teníamos ni dónde practicar, y aún así hemos logrado que estos equipos puedan desarrollar buen fútbol. Entonces acá naturalmente se tendría que obtener ese tipo de logros.

¿Qué pasó con los lesionados en su primera práctica?
Cuando llegué me presentaron a 32 jugadores, de los cuales al inicio de la práctica había 22 y los otros desaparecieron porque estaban lesionados. Ese día comenzamos a ordenar y a ver qué era lo que realmente pasaba. En la siguiente práctica, luego de hablar con el plantel, todos estaban a disposición.

¿Con qué realidad se encontró en Blooming?
Lo real es que llegué a un equipo que estaba mal en todo: en lo físico, técnico, mental y grupal. Eso sí, ahora, y después de 9 o 10 días, el equipo ha cambiado mucho en la parte mental, pues hemos logrado cohesionar bastante las ideas a través de acciones severas con el grupo y hemos comenzado a trabajar duro en la parte física con jugadores que antes tenían algunas dificultades para realizar las prácticas.

¿Se sorprendió por el diagnóstico?
No fue de extrañar para mí, pues los últimos cuatro equipos en los que dirigí, The Strongest, por ejemplo, en el que antes estuvo un DT extranjero, lo conformaban jugadores que estaban muy mal físicamente. Los futbolistas tenían muchos problemas. En Wilstermann, cuando ascendimos a la Liga, también antes que yo, había un extranjero y el equipo tenía los mismos inconvenientes. A Real Potosí llegué el año pasado y el presidente del club ponderaba que el entrenador anterior era muy buenito y buena gente, y que se ocupaba de las divisiones menores, pero su equipo estaba igual que Blooming. Por ello digo que el DT que estaba antes en este equipo era uno que no se ocupaba de lo que tenía que hacer con los jugadores.

¿Y el mal estado físico es porque el jugador boliviano no se cuida?
No es eso. Lo que pasa es que el entrenador extranjero no trabaja con el jugador boliviano, es esa la realidad con la que me encontré en los últimos cuatro equipos que dirigí. La verdad es que, en Santa Cruz en especial, y este es el desafío mayor que tengo acá, siempre escuché decir a la gente de Blooming y Oriente que van a traer a un entrenador de Uruguay, de Argentina o de Tangamandapio, de cualquier lado, pero nunca un boliviano. Tal vez no han tenido buenas experiencias, porque tampoco todos los bolivianos somos buenos DT, algunos sí y otros no tanto.

¿En cuánto tiempo cree que el equipo va a estar listo en lo físico para lo que usted quiere?
Por ahora en este torneo no creo que logremos la plenitud física, pero ya en 10 días el equipo va a tener otro rendimiento físico y técnico; ni hablar del táctico, porque los recorridos que hemos ido entrenando con los jugadores lo han captado rápidamente.

¿Sus equipos corren y presionan bastante, es lo que se perfila ahora?
Vamos a tratar de darle la misma identidad que hemos manejado. Por ahí siempre diferenciando, porque en el Tigre no podíamos hacer que sea un equipo que tenga mucho toque, sabiendo que la característica y el estilo del club no es ese. Hoy le daremos la prioridad a Blooming, que, según sé, le dicen la academia.

¿Qué condiciones pidió para trabajar?
Hemos pedido que se trate de poner al plantel en el mejor estado económico. Ya los dirigentes han hecho un esfuerzo (pagaron un sueldo) y esperemos que en un mes más el plantel esté al día. En el fútbol para poder lograr objetivos concretos y buenos siempre va a ser preponderante que estemos muy bien comandados, es decir que los dirigentes tengan realmente un norte que ellos establezcan a profundidad y a cabalidad; que los técnicos tengamos una propuesta de trabajo concreta y fuerte; y que los jugadores pongan predisposición para el trabajo. En este momento creo que los tres estamos tratando de hacer que cada día que pase se mejore.

¿Armará a Blooming para la temporada 2014-2015?
Por ahora tengo contrato por un año y eso quiere decir que iniciaremos el próximo torneo con el equipo. En ese comienzo se verán seguramente algunas llegadas y partidas, pero puede ser que los jugadores que ahora están den los resultados que queremos y se queden todos.

¿Si está conforme con el plantel vendrían solo un par de refuerzos?
Claro que sí. Hoy Blooming cuenta con 34 jugadores, muchos jóvenes que tienen buenas cualidades. También hay una base de futbolistas importantes de experiencia. En estos pocos días que estoy al frente, he notado que le faltan algunos jugadores de experiencia. Pero por lo pronto se tiene nomás un buen plantel.

¿Cuáles son los objetivos trazados para este torneo?
Hoy, lo primero es dejar las posiciones de abajo. El primer paso que hemos dado es ganar y veremos en los partidos restantes luchar por un campeonato internacional, que ayudaría económicamente al club y haría que sea un poco más fácil traer refuerzos.
Y para la temporada que se viene...

Dependiendo de qué es lo que armemos y qué hagamos con los directivos, el objetivo lógicamente es salir campeones. Yo al club que he ido obtuve el título, entonces intentaremos lograrlo y en el peor de los casos será en el segundo torneo. La idea es que hasta diciembre Blooming alcance el sitial que se merece, tomando en cuenta que el club tiene mucha infraestructura e hinchada numerosa. Creo que con los jugadores que tiene y reforzándolo un poquito puede pelear por un título.

Dijo que los técnicos de acá no saben armar equipos...
Me refería a que no saben enfocar qué hay que hacer con un equipo de Santa Cruz para que salga campeón, pues todo el día están hablando de que no se puede ganar en la altura, pero últimamente los equipos de acá no ganan ni en Santa Cruz. Entonces cómo quieren triunfos fuera.

¿Se considera un técnico estricto?
Creo que soy un técnico que tiene las reglas claras con los jugadores y que las pone consensuando con ellos, intentando que también aporten al mismo reglamento. De esa manera tendrán el compromiso de cumplir esas normas.

¿No tolerará ningún acto de indisciplina?
No, porque no es parte de ser profesional.

¿Ser un ejemplo en disciplina cuando era arquero le trajo problemas?
Sí, y muchos, porque en el momento en el que uno es futbolista, es futbolista igual que todos, sin importar la trayectoria muy grande o chica que se tenga. Me fui hasta los golpes algunas veces porque llegaron borrachos a entrenarse y perjudicaban a los otros.

¿Ahora se daría esa situación?
No. Es diferente porque el que pone las reglas soy yo, y el que quiere cumplirlas sigue y el que no, se va.

¿Su equipo tiene figuras?
Cuando llegué todos eran individuos que querían sobresalir uno sobre otro. Hoy hemos hecho entender que el fútbol es equipo, es unión y que el trabajo de uno sirve para que el otro rinda mejor.

Hay varios DT cochabambinos vigentes...
La mayoría que estamos dando buenos pasos somos exfutbolistas de una escuela, Enrique Happ. Eso fue clave porque en la época de formación tuvimos a entrenadores correctos, que habían ido a estudiar en la AFA o en Paraguay, y nos enseñaron mucho, en especial disciplina.

¿Ya son historia sus momentos de descontrol?
Yo nunca me descontrolé. La prensa es la que dice que me descontrolé, pero no analiza el contexto. Soy una persona que lucho por las injusticias y reacciono cuando veo injusticias. Si tú vienes con tu grabadora y me golpeas la boca, puedo reaccionar. En esa ocasión, los periodistas observaron solamente que yo lancé la grabadora, y no vieron o no quisieron ver el golpe. En otra, los medios informaron de que le pegué a un anciano y yo no toqué a nadie. Yo le levanté la gorra a un señor, que estaba por agredirse con uno de mis futbolistas, pero como quieren ver lo que quieren, ven lo que quieren.

¿Qué tan importantes son el arquero Vaca y Almirón en su equipo?
Creo que todos los jugadores son importantes. En mi debut jugó Braulio Uraezaña, un arquero de 19 años. Realmente me sorprendió todo lo que él hizo desde el entrenamiento hasta el partido. Traté que tenga los menores inconvenientes posibles, en realidad no le dimos bola, le dije tú juegas y listo. La realidad es que si tiene 15 años y está en un plantel profesional tiene que jugar. Y si tiene más de 30 y está en su plenitud tiene que jugar, yo no dirijo con carné de identidad. La verdad es que para mí es importante Uraezaña como Vaca, o Almirón como Carrasco.

¿Habrá refuerzos en el arco celeste?
En el análisis que hemos hecho en este tiempo corto, ese es un puesto que está bien resguardado. Y además tengo otros dos chicos en el equipo, uno de ellos es ‘Manotas’ Araúz. Podemos hacerlos progresar más de lo que están hasta ahora, pues seguramente yo debo saber alguito de entrenar a un arquero.

¿Cómo se imagina a este Blooming al final del torneo?
Recuperado en media tabla de posiciones.

¿Qué piensa de la actual selección boliviana?
¿Acaso hay selección...? No puedo pensar en lo que no existe. Solo hay una persona que dirige un club (Azkargorta, en Bolívar) y que va a estar al mando de dos partidos.

¿Está mal?
Totalmente mal, pues se está desperdiciando el tiempo, al igual que cuando dirigieron Azkargorta, ‘Platiní’ Sánchez y Gustavo Quinteros. Ellos no supieron dar en la tecla de lo que hay que trabajar. Hicieron lo tradicional tratando de juntar a los jugadores más tiempo. Uno pedía unos días más y otros menos. Uno traía un preparador físico espectacular y otro se creía preparador físico. Eso es lo que ha habido en el país hasta ahora, perdiendo mucho tiempo

Sus logros

5
CORONAS ACUMULADAS
Como jugador obtuvo títulos con Bolívar (94 y 96), Wilster (2000) y The Strongest (Apertura y Clausura, 2003)

3
TÍTULOS COMO TÉCNICO
Acumula tres torneos ganados: Wilster, en 2006; Real Potosí, en 2007; y The Strongest, en el Apertura 2011-12


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