La persistente lluvia caída ayer, desde la madrugada, obligó a modificar el plan de trabajo que tenía pensando el cuerpo técnico de Blooming y a buscar techo para no perjudicarse con miras al clásico cruceño ante Oriente, de este fin de semana, por la revancha de la Copa de Invierno. Una canchita de showbol puso en evidencia que la plantilla aún necesita ablandar los músculos, tras una mini-pretemporada.
El trabajo a doble turno que estaba previsto para ayer se modificó. Por la mañana, la plantilla se vio obligada a ejercitarse en el gimnasio de la sede y por la tarde a entrenar en la cancha de showbol Peloteros, por Villa Mercedes.
El trabajo en la cancha de pasto sintético fue dividido en dos partes. Primero el preparador físico Juan Bertani dispuso de una labor intensa en la parte física y luego de fútbol en espacio reducido en las dos canchas.
Todos mostraron aún estar duros por la pretemporada que realizaron hace unos días y fue notorio que los jugadores tuvieron problemas para adaptarse al pequeño espacio y al sistema de juego en estos predios.
Los nervios, imprecisiones y por momentos el juego brusco fueron los que hicieron temer por momentos alguna lesión, aunque después todo se desarrolló con normalidad.
La práctica se prolongó durante casi tres horas, tiempo en el que Sánchez hizo de árbitro y no intervino en momentos medio tensos, como el que vivieron el paraguayo Renato Huth con Paúl Arano, por una pierna fuerte y donde Joselito Vaca hizo valer su experiencia al calmar los ánimos.
Al final, los jugadores recibieron una dosis de frutas con vitamina C para evitar los resfríos y regresaron al hotel Sun, donde están concentrados.
Negocian con Morales
La dirigencia sigue negociando con Bolívar el préstamo del lateral Leonel Morales
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