Con las posibilidades muy reducidas de pelear por el título del torneo Clausura, al estar en la posición octava con 17 unidades y a 20 puntos del líder, Bolívar (37), Blooming se centra en el clásico 162 de la historia del fútbol profesional, en el que intentará lavar su orgullo, ese que está herido porque hace dos años que no puede vencer a su rival.
Es más, a decir del presidente de la academia cruceña, Roberto Fernández, todo el trabajo que el equipo ha venido realizando desde la llegada de la nueva directiva ha estado abocada a preparar el equipo para el partido del domingo frente a Oriente.
“Tal como hemos venido hablando con el plantel, es nuestro orgullo lo que está en juego en este partido. Nuestras posibilidades de pelear por el título están lejanas, pero hemos ido mejorando poco a poco para el clásico, al que llegaremos con la moral alta por la victoria del fin de semana”, indicó el presidente.
Pero Fernández va más allá porque confía en el trabajo realizado por el cuerpo técnico y los futbolistas y sabe que este domingo la hinchada hará la más grande evaluación al equipo, al técnico y a la dirigencia, porque será el primer clásico que encaren en esta nueva gestión.
El presidente de la academia sabe que una victoria de Blooming el fin de semana tendría un significado doblemente satisfactorio para ellos: primero, romperían la mala racha de no poder ganar un clásico hace dos años (la última vez que celebraron fue el 24 de abril de 2011) y, segundo, alejarán a Oriente Petrolero de la lucha por el título, en el que está enfrascado con Bolívar.
Las palabras de Fernández son respaldadas por el entrenador Néstor Clausen, que el fin de semana prefirió dejar fuera de su alineación inicial al delantero argentino Hugo Bargas, que a la postre se ha convertido en pieza clave en la ofensiva celeste.
Espera su oportunidad
Luego de anotar los dos goles de la victoria de Blooming ante Nacional Potosí, Óscar Díaz está a la espera de tener la oportunidad para jugar en el clásico del domingo, aunque sabe que delante de él hay dos de sus compañeros que atraviesan por un buen momento (Hugo Bargas y Hernán Boyero).
“Sé que delante de mí hay dos buenos delanteros, pero los dos goles ante Nacional me devuelven la confianza y me hacen ver que tengo que seguir peleando”, manifestó Díaz.
El equipo tuvo libre ayer y hoy (9:00) reanudará los entrenamientos con miras a este partido, en el que podrán reaparecer Jorge Ortiz, que estaba suspendido por tarjetas amarillas y Ricardo Verduguez, que fue expulsado
No hay comentarios:
Publicar un comentario