Su actitud fue clave para llevarse la victoria. Sí, el defensor de Blooming Maximiliano Ortiz estuvo firme, seguro e imbatible en la última línea del equipo celeste. El destruir el juego de Maximiliano Freitas, su rival, fue importante para que el arco celeste termine en blanco y se llevan una contundente victoria (3-0) en el clásico cruceño 176.
Los problemas económicos quedaron fuera de la cancha, así lo demostró Ortiz, que fue el jugador más destacado en el conjunto académico. ‘Maxi’ estuvo bien parado en la última línea y no se dejó superar por los atacantes del conjunto refinero. El complemento con sus compañeros en la zada fue importante en la victoria academica.
Ortiz hace unos días estaba preocupado porque la dirigencia les adeuda tres salarios, pero volcó la página y se ‘desahogó’ en la cancha. Transportó sus energías para desarrollar lo mejor de su juego y además demostrar que está en condiciones de no moverse de su puesto. El argentino de padre boliviano fue fundamental en la indiscutible victoria de los académicos.
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